Bloque
II
Introducción
En este bloque vamos a trabajar la competencia lectora, algo
muy importante, mediante una serie de actividades, para que les sea más
entretenido a los niños
Hemos elegido el texto de caperucita roja, ya que tiene un
mensaje muy importante, y lo vamos a trabajar en el curso de 2º de primaria.
Es un texto literario.
Antes de la lectura.
Vamos a realizar una seria de actividades previas para
introducir a los niños a la lectura y que hagan con ganas.
-Realiza un dibujo de caperucita roja
-Inventa una pequeña historia leyendo el título.
La lectura la realizaremos en un momento de clase en una
sola sesión después de realizar las actividades previas, lo harán de manera
individual, comentándoles que, si no entienden algo o tienen dificultades,
levanten la mano para que tú les ayudes.
Había una vez una dulce
niña que quería mucho a su madre y a su abuela. Les ayudaba en todo lo que
podía y como era tan buena el día de su cumpleaños su abuela le regaló una
caperuza roja. Como le gustaba tanto e iba con ella a todas partes, pronto
todos empezaron a llamarla Caperucita roja.
Un día la abuela de Caperucita, que vivía en el bosque, enfermó y la madre de Caperucita le pidió que le llevara una cesta con una torta y un tarro de mantequilla. Caperucita aceptó encantada.
- Ten mucho cuidado Caperucita, y no te entretengas en el bosque.
- ¡Sí mamá!
La niña caminaba tranquilamente por el bosque cuando el lobo la vio y se acercó a ella.
- ¿Dónde vas Caperucita?
- A casa de mi abuelita a llevarle esta cesta con una torta y mantequilla.
- Yo también quería ir a verla…. así que, ¿por qué no hacemos una carrera? Tú ve por ese camino de aquí que yo iré por este otro.
- ¡Vale!
El lobo mandó a Caperucita por el camino más largo y llegó antes que ella a casa de la abuelita. De modo que se hizo pasar por la pequeña y llamó a la puerta. Aunque lo que no sabía es que un cazador lo había visto llegar.
- ¿Quién es?, contestó la abuelita
- Soy yo, Caperucita - dijo el lobo
- Que bien hija mía. Pasa, pasa
El lobo entró, se abalanzó sobre la abuelita y se la comió de un bocado. Se puso su camisón y se metió en la cama a esperar a que llegara Caperucita.
La pequeña se entretuvo en el bosque cogiendo avellanas y flores y por eso tardó en llegar un poco más. Al llegar llamó a la puerta.
- ¿Quién es?, contestó el lobo tratando de afinar su voz
- Soy yo, Caperucita. Te traigo una torta y un tarrito de mantequilla.
- Qué bien hija mía. Pasa, pasa
Cuando Caperucita entró encontró diferente a la abuelita, aunque no supo bien porqué.
- ¡Abuelita, qué ojos más grandes tienes!
- Sí, son para verte mejor hija mía
- ¡Abuelita, qué orejas tan grandes tienes!
- Claro, son para oírte mejor…
- Pero abuelita, ¡qué dientes más grandes tienes!
- ¡¡Son para comerte mejor!!
En cuanto dijo esto el lobo se lanzó sobre Caperucita y se la comió también. Su estómago estaba tan lleno que el lobo se quedó dormido.
Un día la abuela de Caperucita, que vivía en el bosque, enfermó y la madre de Caperucita le pidió que le llevara una cesta con una torta y un tarro de mantequilla. Caperucita aceptó encantada.
- Ten mucho cuidado Caperucita, y no te entretengas en el bosque.
- ¡Sí mamá!
La niña caminaba tranquilamente por el bosque cuando el lobo la vio y se acercó a ella.
- ¿Dónde vas Caperucita?
- A casa de mi abuelita a llevarle esta cesta con una torta y mantequilla.
- Yo también quería ir a verla…. así que, ¿por qué no hacemos una carrera? Tú ve por ese camino de aquí que yo iré por este otro.
- ¡Vale!
El lobo mandó a Caperucita por el camino más largo y llegó antes que ella a casa de la abuelita. De modo que se hizo pasar por la pequeña y llamó a la puerta. Aunque lo que no sabía es que un cazador lo había visto llegar.
- ¿Quién es?, contestó la abuelita
- Soy yo, Caperucita - dijo el lobo
- Que bien hija mía. Pasa, pasa
El lobo entró, se abalanzó sobre la abuelita y se la comió de un bocado. Se puso su camisón y se metió en la cama a esperar a que llegara Caperucita.
La pequeña se entretuvo en el bosque cogiendo avellanas y flores y por eso tardó en llegar un poco más. Al llegar llamó a la puerta.
- ¿Quién es?, contestó el lobo tratando de afinar su voz
- Soy yo, Caperucita. Te traigo una torta y un tarrito de mantequilla.
- Qué bien hija mía. Pasa, pasa
Cuando Caperucita entró encontró diferente a la abuelita, aunque no supo bien porqué.
- ¡Abuelita, qué ojos más grandes tienes!
- Sí, son para verte mejor hija mía
- ¡Abuelita, qué orejas tan grandes tienes!
- Claro, son para oírte mejor…
- Pero abuelita, ¡qué dientes más grandes tienes!
- ¡¡Son para comerte mejor!!
En cuanto dijo esto el lobo se lanzó sobre Caperucita y se la comió también. Su estómago estaba tan lleno que el lobo se quedó dormido.
En ese momento el cazador
que lo había visto entrar en la casa de la abuelita comenzó a preocuparse.
Había pasado mucho rato y tratándose de un lobo… ¡Dios sabía que podía haber
pasado! De modo que entró dentro de la casa. Cuando llegó allí y vio al lobo
con la panza hinchada se imaginó lo ocurrido, así que cogió su cuchillo y abrió
la tripa del animal para sacar a Caperucita y su abuelita.
- Hay que darle un buen castigo a este lobo, pensó el cazador.
De modo que le llenó la tripa de piedras y se la volvió a coser. Cuando el lobo despertó de su siesta tenía mucha sed y al acercarse al río, ¡zas! se cayó dentro y se ahogó.
Caperucita volvió a ver a su madre y su abuelita y desde entonces prometió hacer siempre caso a lo que le dijera su madre.
- Hay que darle un buen castigo a este lobo, pensó el cazador.
De modo que le llenó la tripa de piedras y se la volvió a coser. Cuando el lobo despertó de su siesta tenía mucha sed y al acercarse al río, ¡zas! se cayó dentro y se ahogó.
Caperucita volvió a ver a su madre y su abuelita y desde entonces prometió hacer siempre caso a lo que le dijera su madre.
A la hora de la lectura, nos intentaremos fijar que ninguno
se distraiga más de lo debido, y que estén sentados correctamente, para una
mayor concentración en el texto.
Después de la lectura
Actividad de memoria a corto plazo
Deberán de leer atentamente el primer párrafo y fijarse en
los sustantivos, luego de está lista deberán de subrayar los sustantivos que
recuerden
Niña lobo madre perro abuela gato caperuza padre cazador
Actividad para favorecer la atención y habilidad visual
Utilizaremos una actividad que he encontrado en un libro de
lectura eficaz:
Actividad de comprensión
Tras finalizar el texto haremos algunas preguntas de
comprensión como:
-
¿Qué llevaba caperucita en la cesta?
-
¿A dónde iba caperucita?
-
¿Quién rescató a caperucita y a su abuela?
-
¿Qué has aprendido de este texto?
Actividad de anticipación ocular y lectura en voz alta.
Utilizaremos una actividad que he encontrado en un libro de
lectura eficaz:
Evaluación
Para realizar la evaluación de esta actividad, realizaremos
dos tablas, en una evaluaremos nosotros a los niños y en la otra los niños se
evaluarán así mismos, que será más sencilla dado la edad que tienen.
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1
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2
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3
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Antes de la lectura
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Después de la lectura
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En la nuestra evaluaremos las actividades que han hecho con
la valoración de 1, 2 y 3
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1
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2
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3
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Antes de la lectura
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Memoria corto plazo
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atención y habilidad visual
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Actividad de comprensión
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anticipación ocular y lectura en voz alta.
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Conclusión
Esta actividad me ha servido para saber que no solo se
pueden hacer actividades de comprensión lectora en torno a un solo texto, si no
que se pueden utilizar otros recursos para saber cómo fijan su atención en la
lectura
Bibliografía
lectura eficaz juegos de lectura 97 edición bruño “la magia
del samurái”
Bien.
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